Los Rosacruces: ¿orden esotérica?

09.09.2024

A lo largo del estudio del esoterismo, nos hemos topado varias veces con el término "rosacruz" o los "rosacruces". Para entender lo que supone su aparición, fruto de la variedad de pensamiento humanista y mágico de la época, debemos hacer un breve resumen y análisis de cómo se inició este movimiento iniciático, para muchos legendario, su relación con los masones y francmasones, sus símbolos, sus principios y sus técnicas espirituales.

La primera vez que encontramos el término rosacruz es en la obra Fama Fraternitatis Rosae Crucis, en 1614 en Kassel, Alemania, y supuestamente publicada por el que sería el fundador de la Orden Rosacruz, Christian Rosenkreutz, quien habría firmado la obra como Frater C.R.C. Se publica al año siguiente el Confessio Fraternitatis, como un añadido al primer panfleto, y en 1616 se publica en Estrasburgo "Las bodas alquímicas" (título original: Die Hochzeit), donde aparece por primera vez indicado claramente que el autor y fundador es Christian Rosenkreutz. Mientras que las dos primeras obras tienen relación entre sí, la tercera es casi una explicación de los símbolos de las dos primeras, por lo que se piensa que puede deberse a un autor diferente, aunque en él el viaje novelado de un Rosenkreutz anciano contiene tanto simbolismo y metáfora, con tantas pruebas alquímicas y espirituales, que no puede decirse realmente que sea clarificador para nadie que no esté dentro o conozca al menos parte del Rosacrucismo. Empero, tampoco hay consenso sobre quién podría haber sido el redactor de ninguna de ellas. De hecho, hay varios estudiosos que plantean que las ideas rosacrucianas estuvieran ya expandidas y fueran conocidas con anterioridad, yq ue estos textos fueran simplemente una especie de "material para confirmar".

Por supuesto son muchos los historiadores e investigadores que se plantean que esta figura sea inventada o, en su defecto, el nombre sea inventado a propósito para espejar el nombre de su fraternidad (Cristiano + Rosa +Cruz). En efecto, el símbolo de la orden Rosacruz será una rosa con los pétalos abiertos y una cruz encima, o una corona de rosas rodeando una cruz. Para algunos historiadores, tal vez el nombre se tergiversó y s ehacía referencia a la Cruz Roja de los Templarios. Antes que esto, algunos han querido ver en la cruz un símbolo solar, y en la rosa un símbolo de fertilidad, femenino, considerando que la Rosacruz de corte cristiano solamente sería una reinterpretación de unos símbolos que con anterioridad ya tenían un sentido esotérico y dualista.Por otra parte, un posible personaje histórico real, Andreae, fue quien más beneficio sacó de los textos, pudiendo ser su autor, y cuyo escudo familiar también tenía una rosa y una cruz.

Independientemente de esto, el símbolo rosa + cruz ganará mucho simbolismo esotérico según avanza el tiempo. Habrá también múltiples variantes con varias rosas, números de pétalos en concreto, a veces la rosa delante de la cruz y viceversa, y por supuesto, multitud de símbolos alquímicos y esotéricos como los triángulos, estrellas, círculos, cuadrados, o signos provenientes de la astrología y la cábala.

La leyenda acerca de Christian Rosenkreutz comienza con estos panfletos, y toma forma a partir de lo descrito en la Fama Fraternitatis. Las leyendas sobre su vida lo convertían en un hombre europeo aventurero y viajero del S.XV, que habría obtenido sus conocimientos esotéricos en su peregrinaje, en especial por las tierras de árabes y de Oriente, y de un misterioso libro M. A su vuelta habría formado la Orden con 8 compañeros y fundado un templo dedicado al "Espíritu Santo" - aunque no entendido a la manera eclesiástica. A su muerte, la Orden como tal desparecería, pero tiempo después, el descubrimiento de su supuesta tumba, escondida en una cripta bajo tierra tal haciendo referencia al lema de la alquimia VITRIOL, que en latín sería: Visita Interiora Terrae Rectificando Invenies Occultum Lapidem (Visita el Interior de la Tierra; Rectificando Encontrarás la Lápida Oculta.), reviviría la Fraternidad. Allí, el futuro hermano de la Orden que había encontrado la tumba, también encontraría, supuestamente, el cuerpo incorrupto del fundador Rosenkreutz, que habría muerto en el S.XV, y las palabras latinas Iesus mihi omnia, nequaquam vacuum, libertas evangelii, Dei intacta gloria, legis iugum (Jesús mi todo, vacío ninguno, libertad del Evangelio, de Dios intacta gloria, el yugo de la ley).

Otras leyendas intentaban aportar un poco de base histórica y lo hacían parte de una noble familia alemana medieval, los Germelhausel, que vivían en Turingia, y que tras convertirse al catarismo, habría sido ejecutada, salvándose solamente un niño escondido por un monje en Languedoc. Allí el chico habría crecido adaptando el gnosticismo y cristianismo cátaros a todos los nuevos conocimientos que adquiriría en sus estudios y viajes, y provenientes de este monasterio habrían sido sus primeros compañeros con los que fundaría la Orden Rosacruz. Sin embargo tampoco hay base histórica alguna más allá de las tradiciones transmitidas y las leyendas de unos y otros. Algo parecido ocurre con quienes incluso a día de hoy dicen que Rosenkreutz reapareció reencarnado en el misterioso y "longevo" Conde de Saint Germain.

Por estas fechas encontramos también los escritos del alquimista alemán Michael Maier, que relaciona a los Rosacruces con el conocimiento egipcio, y realiza una comparación de sus ritos, símbolos y conocimientos basándose, sobre todo, en textos de Plutarco. El gnosticismo egipcio y el hermetismo formarían parte de la Rosacruz en adelante, si bien las informaciones variarán y por supuesto, el cristianismo seguirá siendo la fuente de conocimiento más perfeccionada, a pesar de todo.

En 1710 Samuel Richter, bajo el pseudónimo de Sincerus Renatus, publicó en Breslau (Alemania) una obra alquímica con el título de La Verdadera y Completa Preparación de la Piedra Filosofal, de la Hermandad de la Orden de la Rosa Cruz de Oro, en la cual se especificaban las distintas jerarquías y cargos de los rosacruces así como sus 72 normas. Decía, igualmente, haber tomado la base de una obra anterior de un maestro de artes, pero una vez más esto se considera una herramienta publicitaria como las anteriores. Lo que sí se puede deducir de la aparición de esta obra es que las primeras sí causaron el suficiente impacto en la sociedad europea como para que se hubiesen creado órdenes rosacrucianas que necesitaran precisamente de un manual iniciático como parece este escrito. Del mismo modo encontramos que 1785 se publica Los símbolos secretos de los Rosacruces, realizada por la Orden masónica "Rosa Cruz de Oro del Antiguo Sistema". Destacar de esta orden que expuso los nueve grados que han seguido la mayoría de organizaciones rosacrucianas posteriore, a saber: Junior, Theoricus, Practicus, Philosophus, Adeptus Minor, Adeptus Maior, Adeptus Exemptus, Magistri y Magi. Aunque otras órdenes, como la AMORC (Antigua y Mística Orden Rosa Cruz), han añadido más grados, hasta alcanzar los 12. Esto por la importancia de la numerología, como veremos más adelante.

Los historiadores coinciden en considerar que la "renovación" rosacruz tiene una base revolucionaria. Ven en los textos mensajes de corte luterano y antipapista, sin despreciar su propia religión cristiana, pero limpiándola de todos aquellos aspectos político-sociales que no consideran aceptables, la mayoría de los cuales se enmarcan en el catolicismo. No es coincidencia tampoco que en la Europa del Sur, mayoritariamente católica, las órdenes rosacrucianas no tuvieran el mismo impacto. Cabe decir también que los Illuminati de Baviera pusieron fuerte empeño en desprestigiar a los Rosacruces, pues las cúpulas de las órdenes secretas y políticas tenían más miembros rosacruces que illuminati, y por lo tanto, no se trataba solamente de cuestiones rituales, sino de poder, y para ello había que meter la religión de por medio, así como las ciencias ocultas, y por supuesto, las relaciones internacionales. Las logias disgregadas suponían menor poder y al mismo tiempo, mayor difusión de ideas.

La relación de la Orden Rosacruz y la Masonería proviene sobre todo del S. XIX, donde hubo gran proliferación de órdenes ocultistas, muchas de ellas fundadas por masones (v. Golden Dawn), y muchas de las cuales mezclaban en sus orígenes e historias a personajes masones y o directamente templarios. La Orden Rosacruz "in Anglia" (Inglaterra) exige tener grado de maestro masón para poder entrar. En la propia masonería actual, el séptimo grado del rito francés y el decimoctavo del rito escocés reciben el nombre de "Príncipe o Caballero Rosacruz", y sus símbolos son la rosa y la cruz, así como el pelícano, que iconográficamente se relaciona con Cristo y la entrega a otros desde el protocristianismo, porque el pelícano, si no tiene nada que dar a sus crías, se deja picotear para que coman de su carne.

Algunas órdenes Rosacruces, sin embargo, basándose en las supuestas reencarnaciones y en caminos filosóficos o ideas religiosas diferentes, insinúan que Rosenkreutz como tal no es el fundador de la Orden Rosacruz, sino que hubo otros antes que él que ya tuvieron el conocimiento superior y vieron dicho simbolismo como su marca reconocible. Para citar un ejemplo, una de estas órdenes "discordantes" es la Fraternitas Rosae Crucis, que tiene por personaje principal y fundador nada más y nada menos que a Paracelso, al que atribuyen los primeros textos. Esta orden se declara americana y de hecho es el único continente en que existe, concretamente en Pennsylvania, en Estados Unidos. Sus creencias coinciden con Paracelso en la creencia de esencia divina e influencias astrológicas en la naturaleza, y por lo tanto el perfeccionamiento del ser humano debe ser tanto en su parte física animal como en su alma.

Las bases de las sociedades de la Rosacruz son semejantes a las de los masones, así como a las de otras órdenes secretas. La búsqueda de la verdad y la perfección espiritual, apoyo incondicional a la orden y a sus miembros, el respeto al prójimo, la discreción en lo que a la orden se refiere, etc. Es destacable el rechazo a la alquimia física y el desarrollo de la alquimia espiritual: una de sus normas es precisamente alejarse de quienes buscan fabricar oro, mientras que del trabajo espiritual dicen que "la alquimia aporta todas las riquezas que se necesitan".

En sus inicios, siguiendo los primeros escritos, la principal dedicación de los Rosacruces debía ser la medicina, viajando y ayudando gratuitamente a todos los posibles con sus conocimientos (¿medicina física o espiritual?). Sin embargo, no tendrían ningún hábito o signo característico, debían vestir con naturalidad y adaptarse a las costumbres locales. Debían reunirse una vez al año de manera inexcusable en el lugar designado, y la firma o sello RC sería una señal bastante para su identificación. Uno de los propósitos de su vida, además del conocimiento, sería encontrar a un sustituto para cuando ellos murieran, que la orden continuase con, al menos, el mismo número de adeptos.

Podemos destacar dos ramas o tipos básicos de Rosacrucismo: el rosacrucismo místico y el rosacrucismo teúrgico. Mientras que el primero intenta nutrirse del conocimiento divino mediante el estudio y la fe religiosa, el segundo emplea la teurgia, es decir, la invocación de seres divinos y espirituales para realizar un contacto más directo. Dicho de otra manera, el rosacrucismo místico sigue las bases del gnosticismo y los estudios esotéricos, esto es, se trata de un trabajo más filosófico y espiritual, mientras que el rosacrucismo teúrgico bebe más las prácticas ocultistas y la magia, y por lo tanto es un trabajo más físico y simbólico. Aun así, en la mayoría de órdenes Rosacruz pueden encontrarse patrones mezclados de individuos que utilizan ambos caminos para su evolución personal. Por ejemplo, es común el uso de la numerología caldea y pitagórica- ya iniciado con los panfletos de Rosenkreutz - y la astrología, independientemente de que se sea más religioso o más ocultista. Uno de los lemas dice lo siguiente: Aquél ante cuyos ojos se abre la naturaleza entera, ése es Rosacruz. Se trata de una oración que bien podría encajar con cualquier estudioso de la magia natural.

A pesar de todo esto, no debe olvidarse que los Rosacruces parten siempre de una base cristiana. Algunas órdenes, incluso, consideran que el faraón hereje Akenatón, quien intentó eliminar el politeísmo egipcio en favor de un solo Dios solar, Atón, habría sido el primer gran maestro o modelo a seguir, al haber entendido la esencia de una única divinidad más allá de los ídolos. La AMORC incluye entre sus leyendas fundacionales que fue Tutmosis III quien fundó la Orden Rosacruz, lo cual habría allanado el camino a Akenatón. En cualquier caso, los Rosacruces realizan todos sus estudios sobre el texto bíblico y el monoteísmo, -además de la cultura egipcia de forma subyacente. De esta manera interpretan sus propias jerarquías y elaboran sus salones e iniciaciones como habría sido, según ellos, el conocimiento de los sacerdotes del Templo de Salomón y del Templo de Jerusalén, pasando velos, salas y cortinajes hasta llegar a donde se encontraría la presencia divina, ya fuera el Arca de la Alianza o en el Sancta sanctorum del Templo.

Reinterpretan los eventos bíblicos desde puntos de vista astrológicos y de cambio de era: por ejemplo, la salida de Egipto de Moisés es el cambio de la era de Tauro (el toro como ser adorado en Egipto) hacia el Aries (el cordero como pueblo hebreo), y cuando el Cordero, es decir, Jesús, se manifiesta, comienza la era de Piscis, es decir, la era cristiana (cuyo primer símbolo era el pez).

Creen igualmente en la reencarnación. Basándose ligeramente en la idea del alma múltiple de los egipcios, consideran que el alma acumula el conocimiento adquirido, los recuerdos, mientras que el espíritu es la energía en sí misma; sin embargo, existe una "muerte espiritual", en el momento en que el espíritu se encarna de nuevo, pues todos los recuerdos quedan latentes, como olvidados, iniciándose un nuevo "alma". Muchos personajes han sido reconocidos como rosacruces reencarnados, basándose en la capacidad de ser reconocidos e incluso de recordar sus vidas pasadas mediante sus actos, siendo el más destacado el ya mencionado Conde Saint Germain. Esto se debe a que las reencarnaciones también siguen un patrón de "justicia", quien ha sido rosacruz - o ha llevado una vida justa, digna, estudiosa, etc como la que ellos promueven - en una vida anterior, y por tanto tiene conocimientos sobre la trascendencia, recibe como "premio" una trascendencia-reencarnación mejor.

La trascendencia no se limita simplemente a nuevas vidas tras la muerte. Los rosacruces creen que a través del estudio y la fe se puede alcanzar la sabiduría divina, y por lo tanto estar más cercano a la divinidad, que suele identificarse como Jesucristo o como el Dios Padre cristiano. Se trata de un estado de consciencia superior, que por otra parte parece beber de la filosofía oriental.

En lo referente a la numerología, las interpretaciones mediante la misma comienzan con als fechas dadas para la vida de Christian Rosenkreutz en la Fama Fraternitatis. Vivió, según ello, 106 años, de donde se puede extraer la suma de 7, así como los número 100, 10 y 6, de valores cíclicos y completivos. No olvidemos además que la numerología pitagórica implica igualmente una asociación de alfabeto y número, por lo que los años de nacimiento y muerte (1378 - 1484) y de supuesta fundación de la Orden (1407), pueden tener mensajes ocultos sólo accesibles a los iniciados.

Paralelamente a la numerología encontramos estudios simbólicos de palabras, textos, lugares, situaciones. Puede que el más destacable sea el cartel INRI de la cruz de Jesús, que popularmente significa: Iesus Nazarenus Rex Iudeorum. Pues bien, tomando las letras con su correspondiente hebrea -Jod, Rain, Nasid y Jot - y sus correspondencias: principio activo + principio pasivo + unión + creación, obtendríamos la misión Rosacruz de la renovación, además de otras frases alquímicas: Igni Natura Renovatur Integra, o Ineffabile Nomen Rerum Initium. No debemos olvidar que muchas órdenes secretas llaman a sus superiores como "Invisibles" o "Inefables".,

La magia en el rosacrucismo se movía entre la magia natural, la magia matemática y la magia benéfica. Ello se sabe por el Tractatus Apolegeticus integritatem Societatis de Rosea Cruce defendens (1617) de Robert Fludd, una apología frente a quienes acusaban a los rosacruces de magia negra y brujería, haciendo referencia a las ciencias incipientes y la espiritualidad, y alejándolos de la goetia, la nigromancia y demás imagénes populares y satánicas que se utilizaban para desprestigiar a la Rosacruz. Muchos pensaron que era miembro de alguna orden, pero no, simplemente consideró, como estudioso, que merecían esa distinción de magias.

Como no podía ser de otro modo, para los actos mágicos también hay representantes y maestros antiguos, esta vez siendo la gran mayoría de ellos personajes históricos reales. La astrología partirá desde Ptolomeo y Clemente de Alejandría; la alquimia, a Roger Bacon. Se dice que Agrippa fue Rosacruz, y que a él se le debe el estudio formal de la magia angélica. A Marsilio Ficino se le atribuye, por su parte, regenerar la magia natural mediante la unión de los trabajos de magia árabe y los de Pietro D'Abano.

A día de hoy hay tanta variedad de tipos de magia practicada que resultaría imposible enumerarlos aquí individualmente. Podemos decir que por ejemplo, la Orden Rosacruz Alpha y Omega - también llamada Dorada - es descendiente de la Golden Dawn u Orden Hermética de la Aurora Dorada y practica la magia que se enseñaba en la misma. Utiliza talismanes, guías herméticas, astrología…. Otras beben desde Paracelso a Blavatsky, pasando por Levi, Crowley, etc: en resumen, su afán de conocimiento considera que no debe cerrarse incluso a ideas que contraríen su propia filosofía. Por su parte, la Orden Kabalística Rosacruz, fundada por Stanislas de Guaita, le da importancia capital al estudio de la cábala y la numerología.

El secretismo de los Rosacruces en la actualidad no es tal, al menos en el 50% de ellas, ya que muchos incluso distribuyen en libros y redes información acerca de sus ritos, su historia o sus miembros. Y como desde sus inicios, continúan las disputas entre órdenes, adeptos, ritos, etc, lo que hace todavía más complejo el estudio de esta orden "ya no tan secreta".

Pietro V. Carracedo Ahumada - pietrocarracedo@gmail.com